Siempre el mismo día

Emma y Dexter se conocen la noche del 15 de julio de 1988, durante su fiesta de graduación en la universidad. Son jóvenes, acaban de licenciarse y el futuro parece ofrecerles una cantidad infinita de oportunidades. La conexión entre ellos es inmediata a pesar de las numerosas diferencias que tienen.

Dexter proviene de una familia adinerada, es un joven despreocupado y aficionado a las fiestas y a las relaciones de una sola noche.

Pero cuando conoce a Emma, cae rendido ante su idealismo. Ella es una joven de clase trabajadora, que ama la literatura y que tiene un humor más que inteligente.

Pero lo que podría ser una relación perfecta toma un rumbo inesperado cuando Dexter se marcha durante un año para viajar por Europa y Emma se queda en Edimburgo, buscando trabajo.